miércoles, 10 de marzo de 2010

Cantemos a María... (final)


Y tras él ... el patio de primavera en mayo, colmado ora de sol y frío, ora de viento y lluvia, nuestro patio de primavera, de repaso de lecciones, de carreras tras los otros o tras el balón de los otros, de corrillos para fumar, privados del universo femenino apenas entrevisto una vez a la semana en el paseo dominical o mejor el desfile de 3 a 5 de la tarde, oyendo los resultados del futbol y alguna canción dedicada de Rafael Farina en el  pretecnológico transistor de algún compañero justo cuando la ciudad dormía, cuando se podía percibir la quietud conventual de aquella vieja Zamora anclada en sus limitaciones históricas, vertebrada por la espina dorsal de Santa Clara.
Y en estas adolescentes tribulaciones se nos iba el tiempo casi sin sentirlo hasta que, sin conocer ni el orden ni la hora, sabíamos que nos acabarían llamando por destinos geográficos para formar, arrastrando aquellas maletas de cartón plastificado, frente al edificio principal en el que nos esperaría un autocar…; aquél autocar siempre con el motor en marcha y un número adherido al parabrisas;  vehículo de ruta discrecional  e indescriptible olor en el que había que realizar un viaje de muchas horas, por rutas nacionales –voy por rutas imperiales- de ida y vuelta, entre ceniceros repletos de colillas, asientos de eskay preñados de gomaespuma y cortinas de ventanilla ajadas, cansadas de tanto ir y venir para ocultar el sol en los tres meses de infierno, de verano y vacación escolar que, varias horas mediante, nos esperaban al final de la ruta.
Basilio

5 comentarios:

jose retortillo dijo...

Quizá sea porque al lugar donde has sido feliz no debieras intentar regresar o porque cualquier tiempo pasado fue mejor o porque sólo se recuerda lo que realmente no se ha vivido o porque la distancia no es el olvido.... En cualquier caso: ¡feliz regreso, Calde! Abrazos. Retor

Basilio dijo...

ya te digo... no me había planteado tan profundas vinculaciones; en todo caso cualquier tiempo pasado, especialmente cuando tenías 16 eños, siempre será mejor que el tiempo presente, siquiera porque ya te has consumido cuatro décadas del tiempo que te toca vivir. ¿no es así?.
Por otra parte estos recuerdos no son mejores ni peores que los del resto de la vida, pero si que son los únicos que comparto con vosotros. Por eso y aprovechando el blog de Salva le pongo algunas palabras a lo que estoy seguro son recuerdos compartidos.. sensaciones... En fin... estas cosas.
basilio

Ángel Martín dijo...

Gracias a los dos por vuestras aportaciones. ¿Para qué escribir cuando vosotros sois capaces de decir lo que pienso y siento mucho mejor de lo que lo haría yo?

Basilio dijo...

gracias Retor y Peque, seguiremos en ello... pausadamente. Hay otro tiempo parcialmente compartido, el de la carrera en Salamanca que también daría mucho de si ¿verdad?... el cine de los sábados por la noche en el Liceo o el Bretón, el café en el Altamira de madrugada, los cachondeos por la calle con Chema y Sieira y la vergüenza que le hacíamos pasar al Reme (Remesal, las bromas con "la muerdos" desde la ventana del bartolo, las excursiones a zamora a buscar huesos y calaveras...las risas con el programa de la Francis.. el calentador de café -tacatum-, las tiendas de campaña de la habitación de 1º... casi nada... Pero... para más adelante.... Un abrazo a ambos. Basilio

Basilio dijo...

A modo de reflexión sobre la aportación de Retor ¿no os parece que cuando pasa el tiempo se te va estrechando el universo de vidas con las que compartes experiencias con cierta proximidad? Fueron... pocas en los años de universidad, compañeros de trabajo después, pocos... pocos.. la familia.. poca... poca. Nunca volverá aquél tiempo de 200 compañeros, casi siempre los mismos durante 4,5 o 6 años con los que compartimos tantas peripecias...entonces aburridas... hoy entrañables... ¡Ay aquel tiempo en que nos llamábamos por cariñoso mote o por una parte del apellido: Retor, Calde, Dela... ¿vamos, no veo yo a mis compañeros de departamento llamándome Calde o Basi.... me da algo....Basilio